Pulgas y vacaciones.


Es muy común que al finalizar las vacaciones la gente venga al negocio para solucionar un problema serio de pulgas en su casa. Esto se debe a que al sacar el perro de la vivienda, los huevos del ambiente no nacen y al entrara a la casa nacen todos de golpe.
Para evitar esto se deben tomar varias precauciones: alrededor de quince días antes de salir de vacaciones se deberán colocar aerosoles de descarga total en la casa, lo recomendable es hacer dos aplicaciones con 7 días de diferencia entre ambas. La utilización de aspiradora durante los días previos a la partida soluciona el problema de los huevos de pulga diseminados por los pisos y muebles. Se debe aspirar toda la casa hasta un metro y medio de altura. La aspiradora debe tener bolsa descartable y se debe eliminar luego de la utilización. Al regresar se debe pedir a alguien conocido que coloque un aerosol un día antes de retornar a la vivienda.
Estas medidas pueden parecer excesivas, pero el que ya pasó por esto sabe que la prevención rinde ampliamente sus frutos. Piense que las pulgas que quedaron en la casa no nacerán hasta que huelan sangre de un animal y esto sucederá al regreso de las vacaciones. Al eclosionar los miles de huevos todos a la vez, las pulgas hambrientas buscarán alimentarse de lo que sea, animales o personas.
Las mismas precauciones se deben tomar antes de colocar las “gotitas” en el perro o gato. Este producto vuelve inútil al animal para la alimentación de las pulgas por lo que al poco tiempo de permanecer hambrientas, estas pequeñas bestias voraces empiezan a picar a las personas.